marzo 11, 2015 // Proyecto MARA
Ante la crecida extraordinaria de los ríos Medina y Gastona, en Tucumán, siguiendo nuestros procedimientos de seguridad, detuvimos la operación de bombeo del mineraloducto y cerramos las válvulas de seguridad el lunes 9 de marzo a la mañana.
Los sistemas de emergencia funcionaron adecuadamente según lo previsto, detectando problemas de comunicación en el sistema de fibra óptica. En el momento el ducto transportaba un alto porcentaje de agua y una porción menor de concentrado.
Las cuadrillas de inspección enviadas en ese momento a las zonas críticas no pudieron acceder inmediatamente a evaluar las condiciones, debido a que las fuertes crecidas cortaron los caminos y anegaron los terrenos, restringiendo el acceso peatonal y vehicular.
El martes fue posible acceder al lugar para realizar una inspección visual, comprobándose que el avance del río Medina había erosionado más de 60 m de su margen izquierdo, lo cual dejó expuesta una porción del ducto que se encontraba soterrada.
Esta situación no garantiza una operación segura, por lo que se procederá a reemplazará la totalidad del tramo afectado por la erosión, una vez que las condiciones climáticas lo permitan. Las autoridades de aplicación intervendrán en la supervisión de los trabajos. Mientras tanto el ducto se mantendrá fuera de servicio.
Lamentamos las consecuencias que estos acontecimientos climáticos están teniendo sobre los pobladores.
Estamos trabajando con las autoridades de la zona de Alpachiri, brindando colaboración con maquinaria y alimentos para atender las necesidades más urgentes de las poblaciones vecinas.
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